El estudio de mercado se debe entender como el conjunto de técnicas y actividades posibles de emprender para recopilar información que permita visualizar, con la mayor certeza posible, en qué situación se encuentra la empresa, en relación a su medio externo.
El análisis del ámbito interno implica:
- Descubrir FORTALEZAS.
- Descubrir DEBILIDADES.
El análisis del ámbito externo implica:
- Identificar OPORTUNIDADES.
- Identificar AMENAZAS.
Este estudio debe realizarse mirando cuatro aspectos básicos:
• la demanda (los clientes)
• la oferta (competencia actual y potencial)
• los proveedores (fuente de recursos)
• los posibles intermediarios (canales de distribución)
• la mezcla comercial presentada por nuestra empresa. (Marketing Mix).
El objetivo fundamental de todo estudio de mercado debe ser el de prever la conducta de los consumidores ante un producto/servicio determinado.
El estudio de la DEMANDA debe clarificar:
¿Quiénes son mis clientes? (SEGMENTO)
¿Dónde están?
¿Qué necesitan? (NECESIDADES)
¿Cuáles con sus preferencias? (DESEOS)
¿Cuál es su poder adquisitivo? (DEMANDA)
El estudio de la OFERTA:
Identifica a los competidores.
Descubre ventajas y desventajas del competidor.
Proporciona información acerca de envases precios, distribución, etc.
El estudio de los PROVEEDORES:
Identifica las alternativas.
Compara precios.
Identifica calidad del producto.
Establece modalidades de pago.
Informa acerca de la distribución (modalidades, cumplimiento de plazos, etc.)
Informa acerca de garantías y servicios post venta.
El estudio de los INTERMEDIARIOS define:
Alternativas.
Mercado que abarcan.
Imagen corporativa.
Exigencias (cantidad, tiempo, embalaje, etc.)
Responsabilidades involucradas en las actividades de promoción.